Los españoles usamos de media 180 bolsas de plástico por habitante y año, lo que equivale a una bolsa por persona cada dos días. De esta forma, se genera una contaminación constante del medio ambiente y un vertido nocivo de residuos plásticos en mares y océanos.
Desde el Gremio de Carniceros – Charcuteros de Valencia apoyamos con decisión la iniciativa impulsada por la Unión Europea con la intención de reducir el número de bolsas empleadas por ciudadano con el objetivo de disminuir el impacto medioambiental que provoca la generación de plástico.
Siguiendo la normativa y apostando por un futuro sostenible, desde el pasado 1 de julio, estará prohibido el reparto gratuito de las bolsas ligeras y pequeñas en nuestros establecimientos comerciales de España, entre los que se incluyen nuestros establecimientos.
Según la directiva europea de 2015, las bolsas de plástico se clasifican, según su peso, en tres categorías: las «muy ligeras», (menos de 15 micras) para productos de higiene, frescos o a granel como frutas, carne o pescado; las «ligeras» (menos de 50 micras), hasta ahora gratis en la mayoría de los establecimientos; y las «gruesas» (más de 50 micras) por las que ya se cobra.
Un impacto medioambiental que podemos cambiar
Según la ONU, cada año los océanos reciben entre 8 y 13 millones de toneladas de plástico. Este hecho presenta una amenaza a la vida marina y a su vez, a la humana, debido a su efecto sobre la cadena alimenticia. Así mismo, destruye los ecosistemas naturales y provoca graves problemas de contaminación en el medio ambiente.
En concreto, las bolsas ligeras son las más contaminantes de todos los grupos debido al carácter de inmediatez con el que se consume. Además, la tasa de reutilización de estas es inferior a las bolsas grandes y tienden a dispersarse en el entorno con más frecuencia debido a su reducido peso.
Desde el Gremio de Carniceros – Charcuteros de Valencia hacemos un llamamiento al uso responsable de las bolsas de plástico y animamos a la reutilización de los objetos fabricados con él.
